Analista advierte alto proceso inflacionario en Bolivia tras la segunda vuelta electoral
El analista financiero Luis Fernando García explicó que la reciente volatilidad del dólar paralelo en Bolivia respondió a la incertidumbre política generada tras la segunda vuelta electoral. Durante las horas de mayor tensión, el tipo de cambio paralelo llegó a bordear los 19 bolivianos por dólar, reflejando la especulación ante la expectativa de los resultados oficiales y la falta de claridad sobre el rumbo económico del país.
García señaló que este comportamiento del mercado se debe a la existencia de dos tipos de cambio —el oficial y el paralelo—, siendo este último el más sensible a las percepciones políticas y la falta de estabilidad. Según el analista, la reacción fue inmediata: “mientras no se sabía cuál sería la resolución de la democracia, el dólar corría hacia arriba o hacia abajo, generando fuertes tensiones en los precios”, afirmó.
El especialista advirtió que, aunque el mercado se estabilizó alrededor de los 13 bolivianos, el país atraviesa un proceso inflacionario “muy alto”, impulsado por la escasez de divisas, el desajuste entre el sector público y privado, y la falta de competitividad. En ese sentido, remarcó la necesidad de que el nuevo gobierno asuma medidas estructurales y claras, que devuelvan confianza al mercado y fortalezcan las reservas internacionales.
Finalmente, García indicó que el Ejecutivo entrante deberá definir su política cambiaria con cautela, considerando propuestas como la banda cambiaria o la creación de un bolsín, aunque advirtió que ambas opciones conllevan riesgos. “Bolivia necesita volver a acercarse al mercado, de lo contrario corremos el riesgo de convertirnos en un país inviable”, afirmó, subrayando que el reto del nuevo gabinete económico será equilibrar las medidas de ajuste con el costo social que estas podrían generar.