La inseguridad en la Ciudad del Alto sigue en aumento, y los vecinos, cansados de los constantes robos domiciliarios, han optado en algunos casos por tomar la justicia en sus manos. Sin embargo, activistas de seguridad ciudadana llaman a la población a no responder a un delito cometiendo otro, recordando que existen leyes que penalizan estas acciones y que la policía está capacitada para intervenir y realizar las investigaciones correspondientes.
Para enfrentar los hechos delictivos, se recomienda implementar medidas preventivas, como la instalación de cámaras y alarmas de seguridad, así como bloquear el acceso a ciertas calles mediante cadenas y candados bajo la supervisión de los vecinos. Además, se están formando brigadas vecinales y grupos de comunicación por WhatsApp, lo que permite a los residentes coordinarse y reforzar la vigilancia de manera efectiva, especialmente en zonas donde la presencia policial es limitada.
Según estadísticas recientes, los delitos han experimentado un incremento de más del 5% en la gestión pasada, afectando tanto a la Ciudad de La Paz como a El Alto. La seguridad, señalan los expertos, no depende únicamente de la policía, sino de la participación activa de todos los ciudadanos, autoridades y medios de comunicación, quienes deben colaborar en programas de prevención, charlas informativas y en la organización comunitaria para proteger a la ciudadanía.