“Cada dirigente tiene que estar 2 años, hasta 4 años”, señala Jaime Solares, exdirigente de la COB

El exdirigente de la Central Obrera Boliviana (COB), Jaime Solares, afirmó que todos los dirigentes deben responder ante la justicia si cometieron irregularidades durante su gestión. Sus declaraciones surgen tras la aprehensión de Juan Carlos Guarachi y subrayan la necesidad de que el gobierno implemente medidas efectivas para investigar y sancionar actos de corrupción que afectaron la economía del país.

Solares recordó que, según el Estatuto Orgánico de la COB, cada dirigente sindical puede permanecer en su cargo hasta dos años, prorrogables a cuatro en casos excepcionales. Sin embargo, señaló que Guarachi excedió este periodo al mantenerse ocho años, lo que debilitó la defensa de los derechos laborales y permitió una mayor influencia del poder político sobre la institución.

El exdirigente enfatizó la importancia de unificar federaciones y confederaciones a nivel nacional mediante congresos de unidad, con el objetivo de garantizar una estructura sindical transparente y representativa. Además, destacó que la aplicación del control social, previsto en el artículo 232 de la Constitución, es fundamental para supervisar la gestión pública y prevenir la corrupción en todas las instancias estatales.

Finalmente, Solares instó al gobierno a cumplir sus compromisos de lucha contra la corrupción y a sancionar a quienes dañaron la economía del país. Señaló que la implementación efectiva de la ley y la supervisión ciudadana son esenciales para fortalecer la democracia, garantizar la transparencia y evitar que los recursos del Estado sean malversados.