PARADAS DE MINIBUSES EN EL PUENTE A DESNIVEL EN SENKATA Y AUTORIDADES NO REALIZAN CONTROLES.

Paradas de minibuses en el puente a desnivel en Senkata y autoridades no realizan controles

Inaugurado hace un mes, el puente a desnivel en la zona de Senkata aún enfrenta problemas de desorden en el transporte público.

En la zona de Senkata, en la ciudad de El Alto, el puente a desnivel, inaugurado hace aproximadamente un mes, sigue siendo un punto de conflicto debido a la falta de control por parte de las autoridades locales. A pesar de los pronunciamientos de la alcaldía en los que se aseguraba que se realizarían los controles correspondientes, la situación actual refleja todo lo contrario. En el lugar, las paradas de los minibuses y otros vehículos de transporte público siguen sin regulación, lo que genera caos y desorden en la zona.

Según la observación en el lugar, los minibuses y vehículos de transporte colectivo se estacionan sin ningún control sobre el tráfico y las paradas, lo que interfiere con el flujo de circulación. Además, hay reportes de buses que esperan a ser cargados con pasajeros en zonas no habilitadas para ello, fuera de la terminal de la ciudad. Esta falta de control es particularmente peligrosa, ya que no se están respetando las normas de tránsito, lo que pone en riesgo la seguridad de los ciudadanos.

Pese a que se había anunciado que no se permitirían paradas fuera de la terminal, la realidad en el terreno demuestra que las autoridades no han cumplido con sus compromisos. A esto se suman las quejas de los transeúntes que cruzan por la zona, quienes denuncian la falta de señalización adecuada para atravesar el puente, lo que incrementa el riesgo de accidentes. Las personas que intentan cruzar la calle en la zona coinciden en que el lugar es "peligroso", ya que no existe un paso adecuado y la señalización es prácticamente inexistente.

La situación en Senkata evidencia una falta de control por parte de las autoridades municipales, a pesar de los esfuerzos iniciales por mejorar la organización en la zona. Mientras tanto, los ciudadanos siguen enfrentando peligros constantes debido a la desregulación del transporte público y la ausencia de medidas de seguridad vial.